Volveré porque tú me lo me lo has pedido,

me equivocaré y quizás me alegre

intentaré rescatar todo lo que me recuerde a ti,

intentaré limpiar con la sangre la mancha de vino tinto,

te regalaré un saco de gatos, una linterna y un globo

pero hay una cosa que no, ya no… a partir de hoy no…

hoy secaré mis ojos de mirarme al espejo, me cansaré de esta cicatriz,

mudaré mis pelos y plancharé por fin la camisa azul…

Ya no esperaré más aquel día, mis inciensos, mis velas serán imperfectas,

me comeré ese jamón al vacío, no habrá desayunos virtuales, futuros, ni astrales…

la vida comienza en mi faro y no me cansaré de dar LUZ.